Desde ANPE Cantabria, como sindicato que defiende los derechos de los y las docentes y la calidad de la educación pública, queremos expresar nuestra más enérgica protesta ante la actitud de la Consejería de Educación en las negociaciones de cupo con los centros educativos y en el nuevo procedimiento de gestión económica.
Lamentamos profundamente la falta de diálogo, la imposición y el trato despectivo que la Consejería ha mostrado hacia los equipos directivos en la última reunión mantenida con los responsables de los centros educativos públicos de Infantil y Primaria.
De dicha reunión nos han llegado múltiples quejas por el tono empleado, exigiendo a los equipos directivos que elaboren por sí solos un trabajo que hasta ahora se venía realizando de forma coordinada entre los equipos directivos y la Inspección Educativa.
Esta actitud no solo es una falta de respeto, sino que evidencia, una y otra vez, una actitud autoritaria y despótica que no favorece el diálogo ni la búsqueda de soluciones consensuadas, algo a lo que, tristemente, la Administración ya nos está acostumbrando.
Queremos apoyar públicamente a los equipos directivos; quienes están en primera línea de la gestión educativa merecen un trato digno y una negociación seria y respetuosa. Lejos de reducir la burocracia, como desde ANPE Cantabria venimos reclamando desde hace tiempo, esta situación no hace más que aumentarla. No se puede cargar más trabajo sobre ellos, especialmente a estas alturas de curso, cuando ya están muy saturados.
Desde ANPE Cantabria animamos a los equipos directivos a que hagan público su malestar ante la Administración, y exigimos a la Consejería que abandone las actitudes autoritarias y abra un verdadero proceso de negociación, fundamentado en el diálogo, el respeto y la búsqueda de soluciones conjuntas, disminuyendo la carga burocrática del trabajo docente.
La educación pública y sus profesionales, que hacen posible su calidad, merecen un trato digno y una gestión transparente.
